Creemos que el verdadero lujo contemporáneo es la posesión de tiempo. Tener tiempo para disfrutar de nuestra casa, leerle un cuento a nuestros hijos, compartir una cena con amigos o beber un buen vino al calor de una estufa a leña, respirar el aroma de la madera que nos rodea es poder vivir la vida con el mismo ritmo pausado pero intenso que desarrolla el árbol durante su crecimiento.
Nuestras maderas son testimonios del tiempo: cuentan historias sobre su origen, sobre sus usos, sobre sus imperfecciones, sobre sus caprichos. Nuestros pisos son sustentables, fabricados con maderas reconstituidas que poseen multilaminados fenólicos de árboles implantados. La garantía de calidad reside en su historia y antigüedad: más de 200 años de vida.